Otro mes y seguimos con mis compañeros del Proyecto Roca con el propósito de ponerle fotos al libro Las Mejores recetas de mi madre de Joan Roca cuyos beneficios son destinados al Banco de Alimentos de Girona.
Este mes Alfonso escogió los calamares a la romana, para que lo tengamos facilito… Ainsss Alfonso,para mí la receta de este mes ha supuesto todo un reto ya que era la primera vez en mi vida que freía algo con éxito… desde luego repetiré (¡aunque no creo que la dieta esté del todo de acuerdo!). Llevaba años sin comer unos calamares a la romana tan buenos, crujientes y sabrosos.
Al ver las cantidades, pensé que me sobrarían muuuuchos calamares pero no fue así… todos desaparecieron antes de que me pudiera dar cuenta… Y creo que muchos se esfumaron mientras estaba liada con la sesión de fotos jejeje Eso sí, me sobró un poco de masa de rebozado.
Como cada receta de este libro mi marido y mi hija me hicieron la ola y la princesita que no es una gran fan de los calamares no paraba de repetir que le gustaban… y repitió 5 o 6 veces, a la tercera ¡dejé de contar!
Ahora sí, os dejo con la receta pero no dejéis de ir a ver las versiones de mis compañeros:
SOFÍA – MIL IDEAS MIL PROYECTOS aquí
BEATRIZ - 2 MANDARINAS EN MI COCINA aquí
CARMEN - YERBABUENA EN LA COCINA aquí
ALFONSO - UN PADRE COCINILLAS aquí
¡Feliz miércoles!
CALAMARES DE LA ROMANA*
Para una buena cantidad
1kg de calamares más bien grandes
2 huevos
300g de harina para la masa + un poco más para los calamares
1cc** de bicarbonato
400ml de agua filtrada fría de la nevera
1 chorro de coñac
1 chorro de sifón (usé agua con gas bien fría)
Sal
Aceite de semilla de uva para freír
Limpiamos los calamares y les quitamos la piel. Los cortamos en anillas que no sean muy gruesas. Reservamos.
Preparamos la pasta de rebozar mezclando la harina en un cuenco con la sal, el bicarbonato, los huevos, el agua fría y el coñac.
Debe quedar una pasta semilíquida, justo antes de añadir las anillas de calamar, añadimos el agua con gas.
Enharimos bien los calamares y los pasamos por la pasta de rebozar y directamente los pasamos en una sartén con abundante aceite caliente (175º). Tiene que haber bastante aceite para que los calamares queden hechos por igual.
Al sacarlos de la sartén, los pasamos directamente sobre papel absorbente, los salamos ligeramente y los servimos enseguida para que no se enfríen.
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
* Del libro Las mejores recetas de mi madre de Joan Roca
** cc: cucharita de café