Quien dice volver a la rutina del blog, dice también volver a participar en retos comunes como el reto tarta de manzana de la entrada anterior o en otros retos como el HEMC#63 que este mes nos invita a compartir los ingredientes de nuestro verano y organizado por Cristina de LeBonVivant.

Así que hoy os traigo una opción perfecta para una comida de fin de semana, en casa o al aire libre o para llevar a casa de amigos. Este verano la he preparado en varias ocasiones y nunca ha sobrado nada, ni unas miguitas. Además con esta receta gané un concurso que organizaba Canal Cocina el año pasado :o) Así que estoy muy orgullosa de ella jejeje.

La receta es sencillita y completa, cruje, los tomates están tiernos y gracias al topping de parmesano y pan rallado no moja la masa dándole un extra de sabor y un crujiente rico que ni os cuento. Sin más os dejo con la receta pero antes quería agradeceros vuestras palabras en el blog o en privado, me son de gran ayuda para seguir adelante con este proyecto que creamos con mi madre.

¡Feliz miércoles!

TARTA SALADA DE TOMATE Y RICOTTA

Para 4 personas

Para la masa

225g de harina semi integral T80

75g de margarina sin hidrogenar

2CS* de semillas de amapola

1cc* de levadura tipo Royal

1 buena pizca de sal

3CS* de leche fría

Para el relleno

4 tomates medianos

100g de ricotta

1CS* de mostaza a la antigua

2CS* de queso parmesano rallado

2CS* de pan rallado de espelta

2 ramitas de tomillo fresco

1cc** de aceite de oliva

Para la masa

Empezamos preparando la masa. En un bol grande mezclamos la levadura con la sal, la harina y las semillas de amapola. Añadimos la margarina cortada en trocitos y  mezclamos para que se vaya impregnando la harina de margarina, hasta que obtengamos una textura arenosa.

Añadimos la leche y amasamos lo mínimo para obtener una masa elástica.

Con un rodillo, la extendemos y colocamos la masa dentro de un molde previamente untado con un pelín de aceite si no es antiadherente.

Con un tenedor, pinchamos la masa por todas partes, sin miedo.

Reservamos en la nevera.

Para el relleno

Calentamos el horno a 210º.

Lavamos y secamos bien los tomates y los cortamos en lonchas de ½ cm.

Untamos la masa con la ricotta primero y después con la mostaza. Espolvoreamos con un poco de tomillo fresco.

Colocamos las lonchas de tomate de manera a cubrir al máximo la masa y espolvoreamos con el parmesano previamente mezclado con el pan rallado y el tomillo sobrante. Rociamos con el aceite de oliva y horneamos durante 35/40 minutos, calor por arriba y abajo sin ventilador.

Servimos caliente, a temperatura ambiente o frío.

¡A disfrutar!

Bon profit!

Algunas informaciones útiles o no tan útiles

*CS: Cuchara Sopera

**cc: cucharita de café

Quien lea el blog a menudo sabe de mi gran pasión por las calabazas, me gustan en cremas, en guisos, en panes e incluso en dulces. Además de ser muy versátiles, su precioso color me trae siempre una gran sonrisa en la cara, así que les he dedicado una entrada especial aquí.

Pero antes de ir a por la receta del día, ¡¡ya tenemos ganador o mejor dicho ganadora para el sorteo del 4º cumpleblog de Come Conmigo!!!

Como podéis ver en las fotos, el sorteo se hizo con el método tradicional de la mano inocente...

Puedo deciros que Polyanna se tomó su papel muy en serio y estaba la mar de orgullosa de saber que saldría en el blog como protagonista :o) Es traviesa así que empezó diciendo que sólo había una "A" en el papel... Pero después no había quien la paraba con el "Mamá, ¿se ve bien el nombre en la foto?"

Y la ganadora es...

Creo que se ve muy bien el nombre, ¿verdad? ¡Laura estoy encantada de saber que muy pronto mis mermeladas volarán a tu preciosa isla!!! Me pongo en contacto contigo este fin de semana!!!! 

Y unas lagrimitas de madre jejeje ¡Qué cambio con el primer sorteo del blog que también hizo ella!!!! 

Después de este momento de emoción, este fin de semana, para dejarme de tanto dulce, después de los panecillos de calabaza y harina de castaña del día mundial del pan, os traigo una ríquisima manera de comer la calabaza, sencillamente asada en el horno pero con unos tropezones de avellanas y una reducción de vinagre balsámico, una manera perfecta de comer verdura disfrutando y a todo color otoñal, ¡claro!

Sin más os dejo con la receta, que esta misma tarde empiezan las vacaciones en el cole y voy a estar muy liada creo yo :o)

¡Feliz fin de semana a todos!!

CALABAZA ASADA AL ESTILO THE SPROUTED KITCHEN*

                                          Para 2/3 personas

Para la calabaza asada

1 calabaza tipo butternut de unos 600/700g, ecológica mejor ya que vamos a comer la piel

6 dientes de ajo grandes

1CS** de aceite de oliva

Sal, pimienta

Para servir

4CS** de vinagre balsámico

2CS** de perejil picado

4CS**de avellanas crudas

Para la calabaza asada

Empezamos preparando la calabaza. La limpiamos bien con agua y cepillo y la secamos muy bien.

Calentamos el horno a 195º, calor ventilado. La cortamos en lonchas de aproximadamente 1/1.5cm y con la ayuda de una brocha, las untamos por todos los lados con el aceite de oliva. Salpimentamos y colocamos sobre la bandeja del horno donde habremos colocado una hoja de silpat. Añadimos el ajo sin pelar y horneamos durante 30/35 minutos, vigilando que no se quemen y comprobando que ya estén tiernas.

Para servir

Mientras tanto, en un cazo pequeño calentamos el vinagre balsámico hasta que espese, tiene que tener una textura de salsa ligera.

Calentamos una sartén sin grasas y doramos las avellanas unos 5/7 minutos hasta que empiecen a desprender un rico aroma a tostado. Las dejamos enfriar en un plato (no en la sartén que se nos quemarían) y las picamos toscamente.

Para servir, repartimos la calabaza asada en los platos, decoramos con un hilo de salsa y avellanas tostadas y terminamos con el perejil picado.

Bon profit!

Algunas informaciones útiles o no tan útiles

*La receta está inspirada en la receta del libro The Sprouted Kitchen, pero también podéis pasaros por su blog, ¡¡¡sencillamente increíble!!!

**CS: Cuchara Sopera

Antes de ir con la entrada de hoy, quería daros las gracias por todas vuestras felicitaciones por el 4º cumpleaños del blog, 4 años muy intensos que quería agradeceros de nuevo :o) Para los que andabais despistados, todavía os quedan algunos días para participar en el sorteo de… ¡¡¡un lote de mermeladas caseras!!!!

Este año, sin lugar a duda me ha dado por preparar muchos tomates asados en tartas o a la provenzal… Claro que al tener un verano fresquito pocos días no me ha apetecido encender el horno, cosa que no me había pasado en años… Vamos, que no hay mal que por bien no venga, ¿verdad?

Preparé muchas tartas saladas con ellos, y últimamente están saliendo más ricas, los tomates están ahora en su mejor momento y antes de que se despidan hasta el próximo verano os recomiendo que os animéis con esta tarta rústica, perfecta para compartir con amigos en una comida informal de fin de semana.

Antes de que lleguen tartas saladas más otoñales como la de ceps y avellanas o la de calabaza, mozzarella y cacao, os puedo asegurar que con poco trabajo disfrutaréis mucho.

¡¡¡Feliz fin de semana a todos!!!

GALETTE DE TOMATES ANTIGUOS

Para 4 personas

Para la masa

100g de harina de maíz

100g de harina de espelta blanca

30g de margarina

30g de mantequilla

1 buena pizca de sal

80g de agua muy fría

1cc* de levadura tipo Royal

Para el relleno

5 tomates grandes y maduros, idealmente de varios colores si podemos dar con ellos

1 huevo entero batido

4 CS** de grana padano o de parmesano rallado

2CS** de polenta rápida

Sal, pimienta

Para la masa

Empezamos preparando la masa. Mezclamos las dos harinas con la sal y la levadura. Añadimos la mantequilla y la margarina y mezclamos bien hasta que nos quede una textura tipo arena. Añadimos el agua bien fría y amasamos lo justo para que no quede una masa manejable, añadiendo un poco de agua o de harina para ajustar su textura. Formamos una bola que aplastamos ligeramente y la colocamos sobre una lámina de silpat o de papel vegetal. Con un rodillo, la vamos estirando dándole una forma redonda bastante grande. Si hace mucho calor, reservamos en la nevera.

Para el relleno

Calentamos el horno a 185º, calor sólo por debajo, sin ventilador.

Cortamos los tomates en lonchas gruesas (algo menos de 1 centímetro) y las vamos reservando.

Batimos el huevo y pintamos toda la base de la masa con él para impermeabilizar la masa del agua de los tomates. Espolvoreamos con 2CS** de grana padano y con la polenta. Después, vamos colocando los tomates encima de la masa dejando como dos centímetros en los lados. Terminamos salpimentando y espolvoreando lo que quede de grana padano. Con cuidado vamos plegando la masa por los bordes para cerrar la galette y con el huevo batido pintamos los bordes exteriores.

Horneamos durante 25 minutos y al cabo de este tiempo, ponemos el horno con ventilador a 180º y cocemos 20 minutos más.

Con cuidado pasamos a una rejilla para que no coja humedad la base y podemos servir caliente, frío o a temperatura ambiente.

¡A disfrutar!

Bon profit!

Algunas informaciones útiles o no tan útiles

*cc: cucharita de café

**CS: Cuchara Sopera