Una rica idea que cambia de las típicas patatas fritas y que además de muy sana, es muy vistosa y rica en proteínas de buena calidad.
Estas albóndigas son muy tiernas y jugosas por dentro, crujientes por fuera con un sabor muy sutil y fino. Una manera de preparar un aperitivo sofisticado pero sin ninguna complicación… y una base que se puede transformar en una hamburguesa original para una cena de cada día.
Con esta receta participo en el HEMC#46 “Delicias para fiestas” cuya anfitriona este mes es Mónica de Tentaciones para todos. Esta receta formará parte del bufete para el bautizo de la peque, así que viene perfecto para este tema.
Con su salsa, es un placer ir mojando las albóndigas o cualquier verdurita cruda para acompañar. ¡Una manera muy sana de picar sin engordar en alguna ocasión festiva!
MINI ALBÓNDIGAS DE POLLO CON MENTA Y GENJIBRE
Para unas 30 mini albóndigas
Para las albóndigas
250g de pechuga de pollo cruda
100g de pechuga de pollo cocida (al vapor o en un caldo)
50g de miga de pan
1 vaso de leche desnatada
2 cebolletas tiernas
1 huevo
1CS* de menta fresca picada
1CS* de cilantro fresco picado
1CS* de genjibre fresco rallado
Sal, pimienta
3cc* de aceite de oliva
Para la salsa
150g de queso fresco griego 0%
1CS* de mostaza con granos
1CS* de menta fresca picada
1CS* de cilantro fresco picado
Sal
Para las albóndigas
Poner la miga del pan en remojo con la leche.
Pelar las cebolletas y picarlas muy finitas.
Picar la carne de pollo cruda y la cocida.
En un bol grande, mezclar las dos carnes picadas, la cebolla, el pan escurrido, el huevo batido, la menta, el cilantro y el genjibre. Salpimentar al gusto y mezclar bien hasta que los ingredientes estén bien repartidos.
Formar albóndigas del tamaño de una nuez gorda.
En una sartén grande, calentar el aceite y cuando esté bien caliente, ir cociendo las albóndigas hasta que estén bien doraditas.
Para la salsa
Mezclar todos los ingredientes y conservar en la nevera hasta el momento de servir.
Servir las albóndigas tibias con la salsa bien fría.
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
Consejo para su congelación del 18/11/2010: los tuve congelados durante un mes completo. Preparé las albóndigas y las deje que se enfríen sobre una rejilla. Cuando estuvieron frías, las puse en bolsas para congelar, bien planas todas al lado unas de otras y deje que se congelen. Cuando llegó el momento de servirlas, las coloqué sobre papel de horno y 15 minutos a 180º en un horno caliente. ¡Listas para comer!
* CS: cuchara sopera
** cc: cucharita de café