Lo que me conocéis sabéis que tengo un reto permanente: hacer que todo el mundo coma verdura, dándole un toque más sofisticado o escondiéndola como es el caso en la receta de hoy.
La mejor opción para que la verdura guste es ponerle un poco de imaginación al asunto y combinarlo con alimentos que a todos les guste.
Existe una opción (casi) universal para tener éxito con verduras: ¡el jamón! Aporta sabor y textura, comes esperando con ganas el próximo tropezón.
Esta receta resultó de nuestras ganas de cenar una sencilla crema de calabacín para darnos algún caprichito de postre... Pero no nos apetecía nada dulce, así que se nos ocurrió tunear nuestra receta de scones en plan salado... ¡¡y verdurero!!
Esta receta es perfecta para los peques a quienes no hay manera de hacerles comer verdura porque su ingrediente super extra secreto (calabacín rallado) no sabe a verdura pero si que da a los scones una textura muy agradable (sin mencionar que también aligera la factura calórica, …). Sin mencionar el placer de encontrar tropezones de jamón de bocado en bocado...
También os dejo la receta de la crema de calabacín que preparamos, es muy sencilla y no muy original pero apenas tiene calorías y puede ayudar antes de los manjares navideños ;o)
Con esta receta participo en el 1er Concurso de Jamón de Trevelez patrocinado por InterJamóny organizado por María, del blog María en esenciaa quien le doy las gracias por animarme a participar. El maestro cortador de la casa ya se les están cayendo las bavas delante de la foto del premio. Menudas propuestas ya están colgadas en el blog de María, ¡seguro muchas recetas os inspirarán!
Así que, ¡manos a la obra!
CREMA DE CALABACÍN
CON SUS SCONES DE JAMÓN SERRANO
(Y SU INGREDIENTE SECRETO)
para 4 personas (10 scones de 7cm de diámetro)
Para la crema de calabacín
2 dientes de ajo
5 calabacines hermosos
2 cebollas
1cc* de caldo vegetal
1cc* de maízena
Sal, pimienta
Para los scones de jamón
275g de harina normal
1CS** de levadura Royal
60g de mantequilla
1CS** de aceite de oliva
80g de leche templada
1 huevo
1 calabacín mediano
120g de jamón cortado en dados medianos
Sal, pimienta
Para dorar, 1 huevo o un poco de leche
Para la crema de calabacín
En la olla exprés, colocamos los dientes de ajo pelados, la cebolla pelada y cortada en trozos grandes, el calabacín pelado (o no según gustos personales) cortado.
Salpimentamos y le echamos el caldo vegetal.
Cubrimos con agua filtrada.
Cerramos la olla y cuando empiece el vapor dejamos cocer 12 minutos al 1.
Después la pasamos por la batidora y cuando estemos para servirla, mezclamos la harina de maïz con un poco de agua, la echamos a la crema de calabacín y mezclamos con las varillas unos 2 minutos para que la crema de vuelva muy untuosa.
Para los scones de jamón
Pelamos el calabacín y los rallamos finito. Lo escurrimos al máximo en un paño limpio.
Mezclamos la harina con la levadura, pizca de sal (ojo porque el jamón ya está salado) y pimienta si nos gusta.
Formamos un hueco en el medio y cortamos la mantequilla en trocitos. Vamos mezclando la harina con la mantequilla hasta que ya no quede trocitos de mantequillaen la harina y que tenga una textura arenosa.
Le echamos el aceite y mezclamos bien.
Añadimos el calabacín y mezclamos bien para que los trozos de calabacín estén totalmente cubiertos por la mezcla de harina y mantequilla.
Añadimos el jamón y mezclamos.
Volvemos a formar un hueco en el medio de esta mezcla y vertemos el huevo batido y la leche.
Amasamos rápidamente y ligeramente (no hay que trabajar mucho esta masa) hasta formar una bola de masa blandita pero que no peque (si acaso, le puedes echar un poco de harina para que no se te enganche en las manos).
Calentamos el horno a 200º.
Mientras tanto, extendemos ligeramente la masa con un rodillo para que tenga un grosor de unos 1,5 a 2 centímetros. Con un vasito o un cortapastas, vamos formando los scones.
Los colocamos sobre una bandeja de horno recubierta de una hoja de teflón o de papel vegetal.
Con un pincel, les damos un poco de huevo batido o de leche para que se doren y horneamos unos 20 minutos hasta que estén bien dorados.
Para servir
Servir la sopa acompañada de sus scones bien calientes.
Se pueden preparar los scones con antelación y hornearlos en el último momento, al momento de comer. Si los haces con mucha antelación, incluso los puedes dejar en la nevera cubiertos con un paño.
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
* cc: cucharita de café
** CS: cuchara sopera
0 ProP por la crema de calabacín
5 ProP por scone