¡Qué ilusión! ¡Hoy cumplimos nuestro primer cumpleaños! ¡Come Conmigo ya tiene su primera velita en el pastel!
Todavía me acuerdo con mucha nitidez la reflexión intensa para escoger la primera receta que colgaría en el blog.
También recuerdo como este blog me hizo más ligeros y alegres los últimos meses de mi embarazo cuando tenía movilidad reducida.
Este año ha pasado volando, conociendo a gente increíble, descubriendo tradiciones y recetas familiares de primera, participando en eventos y concursos para ir más allá de nuestro recetario habitual.
Gracias a todos por compartir y probar varias recetas, por animarnos y dejar comentarios, consejos y recetas… ¡y tantas cosas más!
Hoy para ir más allá en nuestra complicidad y compartir todavía más cosas juntos, ¡os propongo un sorteo!
Hemos ido “mermeladeando” mucho este verano y no me ha dado tiempo colgar todas las ricas ideas que tuvimos pero me hace mucha ilusión compartir con vosotros el fruto de estos experimentos.
Así que las reglas del sorteo son muy sencillas: deja tu comentario en esta entrada y el domingo 10 de octubre una mano inocente escogerá un nombre. El nombre del alegre vencedor se publicará por la tarde (cuando la peque nos deje, jejeje).
Y casi me olvido del premio: una mermelada casera cuya receta viene a continuación: una asociación inédita y sabrosa de melocotón y… ¡azafrán!
Si no te quieres lanzar en esta receta pero te apetece, ya sabes que te toca: ¡deja tu comentario… y haz correr la voz!
MERMELADA DÚO DE MELOCOTONES CON AZAFRÁN
para unos 8 potes de mermelada
2,1kg de una mezcla de melocotones de agua y de viña sin hueso y pelados(unos 3kg antes de preparar)
1,4kg de azúcar para mermeladas
20 filamentos de azafrán
1 sobre de pectina natural (opcional pero viene bien según los melocotones tengan más o menos agua)
Cortar los melocotones en lonchas finitas de unos 2 o 3 mm.
En un caldero para mermeladas, mezclar los melocotones con el azúcar y el azafrán.
Poner a fuego medio hasta que el azúcar esté fundido y forme como un almíbar alrededor de los melocotones.
Parar el fuego, dejar enfriar, tapar con papel film y conservar una noche completa en la nevera.
Al día siguiente, calentar a fuego vivo hasta que rompa a hervir y dejar cocer unos 7 minutos.
Añadir un sobre de pectina según las recomendaciones del sobre y hervir 2 minutos más.
Probar el punto con la prueba del platito*.
Cuando la mermelada esté en su punto, verter todavía hirviendo en los potes y ponerlos boca abajo.
Esperar por lo menos 72h antes de pasteurizar** la mermelada.
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
*La prueba del platito
Ya sé que existen varios métodos serios para averiguar si la mermelada está lista o no. Pero a mí, la que más me gusta, es la que suele usar mi abuela: cuando se empieza a preparar la mermelada, se pone un platito en el congelador y cuando se quiera averiguar si la mermelada está en su punto, se vierten una o dos gotas de mermelada sobre el platito. Si se corren en el plato, hay que añadirle algún tiempo de cocción. Si se aguantan, esto significa que la mermelada está lista.
Pero nunca hay que olvidar que todas las frutas no “cuajan” de la misma manera, o sea que la mermelada de fresa nunca será naturalmente tan firme que la de plátano por ejemplo.
** Pasteurizar mermelada casera
Suelo usar menos azúcar en mis mermeladas que en las recetas clásicas. Para que me duren meses (¡e incluso años!) a pesar de esto, siempre las esterilizo. ¿Cómo? Es muy sencillo: en la olla presión, 5 minutos al 2. ¡Y ya está! Así las puedo conservar varios años: algunas que se habían escondido incluso me duraron 3 años (más la verdad es que no lo sé porqué ¡¡¡nunca he tenido mermeladas que duren tanto!!!).
1ProP por cada 3 cucharas soperas