Después de una tarta de manzana, de unos mini bundts y de un yogur de naranja, creo que ya tocaba una cremita para cuidarnos, en la línea de la sopa miso.
Hoy os traigo una cremita otoño/invierno muy original, inspirada del libro Cojean tout simplement. La he preparado con los últimos membrillos que teníamos en casa y os puedo decir que su textura es absolutamente increíble.
Sedosa, suave pero pocas personas adivinarán que se debe a la presencia de membrillo entre sus ingredientes. Una idea distinta y muy rica, para luchar contra el frío. Y claro, no os perdáis el índice de recetas de sopas y cremas con maravillas de sabor con apenas calorías u opciones menú completo en un bowl :o)
Espero os guste y ¡¡¡feliz semana a todos!!!
CREMA DE PUERROS Y MEMBRILLO*
Para 4 personas
1cc** de aceite de oliva
190g de puerros (parte blanca, limpia, cortada en rodajas finas)
365g de membrillo (con piel pero sin las partes duras, cortado en dados no muy grandes)
Sal
½ cc** de curry en polvo (dependiendo del que tengáis, mejor poner menos e ir ajustando al gusto de cada uno)
Calentamos el aceite de oliva y añadimos los puerros, los salteamos un poco vigilando que no tomen color. Añadimos el membrillo y añadimos un poco de sal.
Vertemos 700ml de agua filtrada y cocemos con tapa a fuego medio durante 15 minutos, hasta que el membrillo esté tierno.
Trituramos la crema muy fina, añadimos el curry y ajustamos de sal y especias al gusto de cada uno.
Servimos bien caliente y pedimos a los comensales adivinar cuáles son los ingredientes de la crema :o)
Bon profit!
Algunas informaciones útiles o no tan útiles
* La receta original la podéis encontrar en Cojean tout simplement aquí.
** cc: cucharita de café